martedì 27 settembre 2011

Hug Me!



Beyond all reason. theory. thought. effort.
shape, colour and kind:

LOVE
is the only thing that matters.


(Forum, Barcelona)



Siesta


Aprender a enfrentarse a la vida
con soberana, descarada indolencia
que el mundo siga dando vueltas, si así le parece,
que la gente siga corriendo: 
yo aquí me quedo, meciéndome en la sombra.


(patio del Museo Reina Sofia, Madrid)

giovedì 22 settembre 2011

Llaves




Estaban a medio colgar, ni dentro ni fuera.
Así las encontró el cerrajero que vino a rescatarme esta noche. Había sido cuestión de un instante: salí con el móvil en una mano y una copia de las llaves en la otra, para dárselas a Judith que me esperaba abajo.
Click, la puerta se cerró en slow motion, y ahí me di cuenta. Click. Mis llaves estaban metidas en la cerradura.

Lo intentamos: intentamos meter la copia y empujar para que la otra saliera del otro lado, intentamos desmontar el bombín, intentamos con mi tarjeta caducada del Cine Renoir, eso que se ve hacer en las pelis con la radiografía. Intentamos con una horquilla. Nada.
Frustradas, bajamos: llamé a uno de los mil números pegados en los marcos de la entrada de la tienda de Emi, llamé a otro y era el mismo de antes, le dije que viniera. ¿Había otra solución?

Y cuando llegó metí la copia en la cerradura para enseñarle cómo se quedaba atascada y no, mágicamente entró y giró, el mecanismo hizo el click más fluido que he escuchado en la vida y la puerta se abrió perfectamente. Él me miró y su mirada me dijo alguna cosa entre "esta tía está loca" y "vaya gilipollas".

Mis llaves estaban así, a medio colgar. Ni dentro ni fuera.

¿Qué habrá pasado en esa media hora? Yo no consigo darme paz. 
Suerte que Judith estaba conmigo y pudo confirmarme que sí, que antes la cerradura estaba de verdad, realmente, a todos los efectos atascada. Suerte, porque si hubiera estado sola, habría dudado seriamente (aún más) de mi salud mental.

mercoledì 21 settembre 2011

Evaporare

Musica.
Ci vorrebbe della musica 
dita lunghe che scivolano sui tasti di un piano a coda
Una colonna sonora alle mie parole stonate.

Ombra allontanati, vai via da me
smetti di azzannarmi alle gambe come una cagna rabbiosa
esci dai miei polmoni che trattengono il respiro:

Non posso 
più 
respirare.

Tra le tue trame fitte ho perso la vista
la strada
e il senso della realtà

e mi sono persa
e mi sono persa, persa
rinchiusa all'interno di me stessa.

Io sono uno specchio rotto.
Frammenti di vetro scheggiati sparsi a terra
che riflettono un'immagine distorta
mi guardo dall'alto ed eccomi, un mostriciattolo che fa le smorfie.

Sono un giocattolo smontato e cerco di ricostruirmi senza il libretto di istruzioni
troppi pezzi avanzano
troppi pezzi, e non so cosa farne

da qualche parte dovranno pure andare
li raccolgo tra le mani e mando giù
bevo tutto di colpo prima di pensarci sul serio
ma il sapore amaro non mi fa dormire
e cerco la porta di casa a tentoni nel buio
perché è notte e non ho voglia di accendere la luce
perché è notte fonda qui, e non ho voglia di accendere la luce.

Ombra che mi accompagni e mi tieni per mano
lascia che io ascolti almeno un po' di musica
dita lunghe che scivolano sui tasti di un piano a coda
per accompagnare queste parole stonate

sarebbe più facile abbandonarmi al sonno
se potessi immaginare finalmente di svanire nella notte
evaporare, soave e fresca come goccioline di umidità 
così leggere che quasi non esistono.




(Soundtrack: Maika Makovski, Disappear)